PINCELADAS de la Historia, con David.

• Texto: 1º Samuel 16:1-13 ... y si no lo lees, no te enteras!!... vé!
  
  Unción... mmmm..
  No es lo mismo unción que éxito, ni aceptación que autoridad, ni presencia de Dios que vida cristiana... no es lo mismo hermosura que hallar gracia, ni crecimiento que ir hacia adelante.
  No es lo mismo!!!
  Hay mil maneras de llamar a las cosas, de hacer las cosas, de sentir las cosas, pero lo que realmente no carece de propósito es lo que agrada a Dios.
  
  David era poquita cosa, el más pequeño de sus hermanos, un tío guapo, sí.. pero desde luego no pensaron en él para nada más que cuidar ovejas...ese era realmente el valor que le dio su familia, y lo bueno es que el chaval era bueno pastoreando!!... pero Dios mira con otros ojos, la visión y el valor de Dios va mucho más alla, no se mide nunca por la medida humana.
  "Y Jehová respondió a Samuel: No mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que mira el hombre; pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón. " (1 Sam. 16:7)
  
  David tenía algo diferente, algo más que arte tocando, que destreza pastoreando, que hermosura en su cara, que carisma arrolladora.... tenía un corazón diferente, un corazón que en la soledad de su rebaño había cautivado el corazón de Dios. Era un tipo valiente, responsable, entregado, era un adorador, fiel a Dios, protector de su legado... Y Samuel tomó el cuerno del aceite, y lo ungió en medio de sus hermanos; y desde aquel día en adelante el Espíritu de Jehová vino sobre David... las cosas cotidianas, tomaron más fuerza en la vida de David, cuando Dios le incluyó en planes más altos. Y la sencillez del pastorear a cuatro ovejas sirvió para gobernar una nación... la valentía para defender su rebaño no le hizo dudar para enfrentarse a un filisteo arrogante.
  HASTA AQUI, SOLAMENTE...
  
  Para cualquier cosa a la que Dios me llame y me envíe necesitaré algo más que mi arte y mi destreza, necesitaré Su unción. Con ella lo tengo todo, sin ella estoy perdida. Dios no da unción a cualquiera, malas noticias, pero es así.
  Por ello, debo cuidar mi corazón, para poder vivir conforme a la voluntad de Dios, porque eso es lo que Él mira, y Dios no deposita autoridad espiritual sobre cualquiera.
  Dios usará mi vida en medida de mi integridad y mi corazón en las cosas cotidianas. Necesito plantearme si estoy dispuesta a que en medio de mi rutina Él me llame y me prepare, con todo lo que eso implica.
  "Oír Su llamado y dejarme preparar", puede ser cosa de 14 años, como en el caso de David...
  Lo que hoy realizo en mi día a día, se potenciará mañana en Su mano, por Su mover en mí, en planos más elevados al terreno que hoy piso.
  Y yo me digo a mí misma: Amen!... porque experimentar la realidad de la presencia de Dios en mi vida, qué quieres que te diga, me quita el sueño!!... yo quiero más!  ツ
  
  ... MAÑANA MÁS!!