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miércoles, 27 de marzo de 2013

David llora por Saúl...

David tenía un corazón agradecido a Dios. Cuando muere Saul, David llora su muerte sin avergonzarse y además no se regocija de que su enemigo haya muerto. A considerar!!! Cuando a mi enemigo le van las cosas mal me alegro??? Orar por los enemigos seguro que cambia las cosas, aunque no es fácil. Es un DESAFÍO!!
El lamento más profundo por la muerte de Saul vino de la persona a la que más había odiado y a la que había perseguido insistentemente, David.

Eso es cierto. Cierto!! .. El caso es que en el corazón de David había más temor de Dios por el ungido de Jehová que odio. Él se enfrentó a Goliat, porque Dios era quien libraba esa batalla... ¿por qué ahora había de tomarse la justicia por su mano con Saúl?... Dios era soberano en la vida de David... Su filosofía de vida era "Lo que tenga que ser, Dios hará. No haré nada que no me mueva Dios ha hacer"... Ahora, me encanta los toques de atención que le da David a Saul, cortando su manto, diciéndole, "Chiquito, te tuve en mis manos y respeté tu vida, ya basta, no?" ... eso es lo que le decimos al enemigo cuando devolvemos bien por mal... Quien lo oye?, Dios, y Él nos libra de nuestros enemigos.
Lo siento por Saúl, pero no se puede desafiar tampoco a los que SERÁN ungidos de Jehová.... y eso, nunca lo sabemos, no?

Mañana más!!


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